Un altocomisionado de la paz consideró que el gobierno de Juan Manuel Santos ha defendido la tesis de que se puede negociar en medio del conflicto, como ocurrió durante casi todo el proceso de paz con la exguerrilla de las FARC. El Presidente colombiano suspendió los diálogos de paz con el ELN por los últimos atentados de esa guerrilla. Foto: EFE
La negociación entre el Gobierno colombiano y el ELN no se ha roto, aunque la dinámica que se había alcanzado está afectada por los atentados con explosivos cometidos por el grupo guerrillero, afirmó hoy martes 30 de enero del 2018 el altocomisionado para la paz de Colombia, Rodrigo Rivera.
El funcionario recordó que el Gobierno ha defendido la tesis de que se puede negociar en medio del conflicto, como ocurrió durante casi todo el proceso de paz con la exguerrilla de las FARC, pero que eso tiene “límites de lógica, racionalidad y coherencia“.
“El proceso no se ha roto pero la dinámica que se había logrado ha sido seriamente afectada por estos actos terroristas. Eso no excluye que haya iniciativas de terceras partes (para reanudar la negociación), que haya contactos”, dijo Rivera en declaraciones a la cadena de radio Caracol.
Rivera justificó así la decisión tomada el lunes por el presidente Juan Manuel Santos de suspender por tiempo indefinido el inicio del quinto ciclo de negociaciones con el ELN (Ejército de Liberación Nacional) como consecuencia de los atentados cometidos por el grupo guerrillero el pasado fin de semana.
El ELN se atribuyó en un comunicado un ataque con explosivos perpetrado el sábado contra una estación de la Policía Nacional en Barranquilla, que dejó cinco agentes muertos y 41 heridos.
El Gobierno considera que ese grupo también fue el responsable de otros dos atentados cometidos el domingo contra las comisarías policiales en los municipios caribeños de Soledad y Santa Rosa del Sur, que dejaron dos agentes muertos y siete heridos.
Santos dijo que la instalación de la quinta ronda de negociaciones solamente ocurrirá cuando el Gobierno vea que hay “coherencia por parte del ELN entre sus palabras y sus acciones“. Asimismo, el jefe de Estado ordenó a la fuerza pública incrementar sus operaciones para perseguir a los integrantes del ELN.
Rivera recordó que en el caso de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) se aplicó la estrategia de “negociar como si no hubiera confrontación y confrontar como si no hubiera negociación”, pero que existen “límites que colman la paciencia”.
“Son hechos inadmisibles, terroristas, que colman la paciencia del presidente y de los colombianos (…) Si ellos (el ELN) ordenan cesar los atentados y lo cumplen, se dan las condiciones de coherencia que pide el presidente”, dijo.
El Gobierno y el ELN iniciaron las negociaciones en Ecuador hace casi un año y su principal logro fue pactar un alto el fuego y de hostilidades que se cumplió del 1 de octubre de 2017 hasta el pasado 9 de enero.
El quinto ciclo de negociaciones debía empezar el 8 de enero y se pensaba que el cese del fuego sería prorrogado, pero los problemas empezaron cuando la reunión fue pospuesta para dos días después, tras lo cual el ELN empezó a cometer ataques contra blancos militares y la infraestructura petrolera.