El Código de Ética de A. País busca diversificar las vocerías

Redacción Política

Un mecanismo para que ninguno de los 53 asambleístas de Alianza País hable a nombre del bloque. Eso se planeaba estudiar ayer, en la reunión del movimiento.
 
Los integrantes de la bancada tenían previsto  presentar un Código de Ética a manera de borrador, para estructurar el trabajo. 

Además,  se planeaba debatir  una propuesta de Plan de Comunicación. Se trata de  una estrategia mediática para posesionar la gestión de los  asambleístas. También para definir y diversificar la vocería sobre temas específicos en los cuales determinados legisladores tengan  conocimiento.  
 
Gastón Gagliardo comentó que esto no significa que cada asambleísta no podrá dar    su opinión a título personal. “El problema es que alguien decía ‘el movimiento decidió tal cosa’. Nos enterábamos por la televisión o por otros medios de comunicación. Y  nos preguntábamos cuándo hubo una votación al respecto. Se  tomaban el nombre de la bancada”.

Negó que la posición de un grupo de asambleístas sobre la fiscalización a Washington Pesántez haya sido el detonante.
Rosana Alvarado, quien junto con María Paula Romo, Paco Velasco y Virgilio Hernández se abanderaron del proceso de fiscalización, no quiso pronunciarse.

Dijo que lo mejor es que lo hiciera  quien propuso la idea de contar con un Código de Ética.

Gagliardo indicó que   quieren conversar sobre la posibilidad de que otros integrantes, además de Fernando Cordero y Romo, integren el buró nacional, para poder  incidir en las decisiones.

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