La Nación, Argentina. GDA
El segundo filme del director Joel Hopkins, ‘Last Chance Harvey’, propone una acumulación de clichés, fórmulas y lugares comunes de la comedia romántica con protagonistas adultos.
Pero lo hace con premeditación y alevosía, como un juego para que el espectador se sumerja en este cuento de hadas de la mano de dos grandes intérpretes -infrecuentes en este tipo de productos- como Dustin Hoffman y Emma Thompson.
Hoffman es Harvey, un frustrado pianista de jazz divorciado que se gana la vida en Nueva York componiendo jingles para comerciales (y que además está a punto de ser reemplazado en la agencia por un colega más joven). Thompson es Kate, una solterona encuestadora del gobierno en el aeropuerto de Heathrow y vive dominada por su madre.
Harvey debe viajar a Londres para participar de la boda de su hija y se encuentra con que, mientras todos se hospedan en una casa familiar, a él lo han instalado en un hotel. Poco después se enterará también de que la novia ha preferido que sea su madre la que se encargue de todos los detalles y de que sea su padrastro quien la entregue en el altar.
Hasta aquí el planteo inicial del filme. Lo que sigue es el amor que llega a los 50 entre el estadounidense y la inglesa, en medio de conflictos madre-hija y padre-hija, inseguridades afectivas, problemas laborales y una trama que apuesta por la redención y las segundas oportunidades.
Las hermosas locaciones de Londres, algunos simpáticos personajes secundarios, pero sobre todo el carisma y la nobleza de la dupla protagónica relegan ciertas superficialidades de una comedia liviana, efímera y bastante satisfactoria.
‘Last Chance Harvey’
Dirección: Joel Hopkins
País: Estados Unidos
Año: 2008. Dur.: 92 min.
Género: Romántica
Calif.: Todo público