En los últimos tres años, seis casos del narcotráfico en los que fueron detenidos miembros de la Policía se han registrado en el país. En el último hecho, a un coronel que fue jefe de Interpol lo apresaron para las investigaciones junto a un mayor y dos agentes de tropa.
En el operativo denominado Águila se resolvió este caso. La investigación se realizó durante un año y, aparte de los gendarmes, otras seis personas fueron apresadas. “Esta banda operaba en la contaminación de contenedores con productos de exportación, específicamente flores, destinadas a Europa, fue interceptada en el aeropuerto de Latacunga”.
En otra investigación, cinco policías fueron detenidos porque supuestamente colaboraban con una red del narcotráfico que enviaba droga desde el aeropuerto de Quito. Los investigadores establecieron que los sospechosos estarían implicados en gestión, organización y envío de correos humanos y carga, con droga hacia el exterior.
“Mediante acciones coordinadas, aprovecharon sus labores desempeñadas en la terminal aérea para facilitar la salida del alcaloide; por cada kilo enviado cobraban de USD 3 000 a 4 000”, precisó el Ministerio del Interior.
Los cinco policías detenidos son el teniente Gabriel A. el cabo Héctor Ñ., el cabo Darío A., el sargento Víctor G. y el sargento Xavier Ch.
Pero estos no fueron las únicas denuncias. En octubre del año pasado, el capitán Alberto V. fue detenido porque supuestamente era el nexo entre los jefes de una organización dedicada al narcotráfico que también aparentemente organizó la fuga de un grupo de internos de La Roca.
“Enganchamos la información de esta banda en coordinación con la Policía peruana hace 6 meses cuando se detuvo a algunos de los delincuentes fugados de La Roca, en Perú. Allí logramos también acceder a información específica que vinculaba a este oficial de la Policía aprehendido ayer, y a través de él establecer las conexiones con el jefe de jefes de las bandas”, manifestó el ministro del Interior, José Serrano.
Serrano indicó que, según las investigaciones realizadas por Inteligencia policial, la banda desarticulada controlaba el micro tráfico del norte de Guayaquil y alrededor del 90% de los actos delictivos producidos en Manabí.
Un coronel sentenciado
En el año 2011 se detuvo a Galo C., un coronel en servicio pasivo que en ese entonces era comandante de Policía de Esmeraldas. Este fue apresado en el operativo Resurgir realizado en la parroquia Tachina en Esmeraldas el 28 de noviembre de ese año.
En este operativo se habría decomisado una tonelada y media de cocaína. Este alto oficial fue sentenciado a seis años de reclusión mayor extraordinaria y a pagar 100 salarios mínimos generales.
En ese año mismo año, el 19 de septiembre, en Zamora, fueron arrestados tres agentes de la Policía, Víctor H., Joffre A. y Henry G. Se les investigó por tenencia ilícita de estupefacientes. En este operativo se decomisaron 4 970 gramos de cocaína (unos cinco kilos).
Un caso en el puerto de Guayaquil en el 2014
Dos policías ecuatorianos fueron capturados el 26 de septiembre pasado por supuestos vínculos con una organización de narcotraficantes, a la que se le decomisó unos 250 kg de cocaína.
“Se ha decomisado aproximadamente 250 kilos de cocaína, hay doce detenidos, entre ellos un ciudadano colombiano y dos policías (ecuatorianos) en servicio activo”, dijo el fiscal que maneja el caso. Añadió que los uniformados “aparentemente (…) daban seguridad a esta organización criminal” y que el alijo sería enviado a Europa.
La droga fue incautada durante una intervención de la Policía en una bodega del norte del puerto de Guayaquil (suroeste), en donde pretendía ser camuflada dentro de un cargamento de pulpa de fruta.