Hallan casi 400 kilos de cocaína en Embajada rusa en Buenos Aires
El cargamento fue trasladado en un avión del servicio federal de seguridad ruso. Foto: AFP
Los Gobiernos de Argentina y Rusia desbarataron una banda que intentó traficar casi 400 kilogramos de cocaína en maletas diplomáticas a través de la Embajada rusa en Buenos Aires, en un operativo de 14 meses que dejó cinco detenidos y un prófugo, informó hoy 22 de febrero del 2018 el Ministerio de Seguridad argentino.
Dos personas fueron detenidas el miércoles 21 de febrero en Argentina, otras tres en Rusia y una sexta persona había sido arrestada anteriormente, de acuerdo a un comunicado oficial.
En tanto, el presunto líder de la organización narco se encontraría prófugo en Alemania, donde es buscado por Interpol tras recibir una orden de captura internacional, precisó la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich. La droga fue valuada en unos 50 millones de euros (USD 61 millones).
"Hemos desmantelado una organización internacional de tráfico de cocaína entre la Argentina, Rusia y Alemania. Fue posible gracias al trabajo conjunto con el Ministerio del Interior ruso, la Embajada de Rusia en Argentina y el Servicio Federal de Seguridad ruso", además de la Justicia y fuerzas de seguridad argentinas, indicó Bullrich.
El operativo constó de escuchas telefónicas, seguimientos, tareas de inteligencia y un acuerdo de confidencialidad que permitió mantener en secreto el proceso.
El embajador ruso en Argentina, Viktor Koronelli, alertó el 13 de diciembre de 2016 a Bullrich sobre "la sospecha de que en un anexo de la Embajada rusa, que es territorio ruso, había droga", según explicó la ministra.
Se alertó a la Justicia y a las fuerzas de seguridad, que comprobaron que en 12 maletas había 360 paquetes con 389 kilogramos de cocaína.
Bullrich precisó que en horas de la madrugada "se hizo una operación de sustitución de esa cocaína por 389 kilos de harina (...) y se colocó a cada valija (maleta) un dispositivo de seguimiento" para generar una "operación de entrega vigilada".
"Tenían que llegar a Rusia, que era el destino de esa droga", para desbaratar la organización, agregó la ministra en una conferencia de prensa en Buenos Aires. Luego de varios intentos frustrados, las maletas con el cargamento falso viajaron en diciembre pasado a Moscú "en un avión del servicio federal de seguridad ruso, que fue el eslabón que permitió que esto terminase llegando allá", declaró Bullrich.
Las maletas fueron enviadas en el marco de una mudanza de autoridades diplomáticas rusas. Por ser equipaje diplomático, no fue sometido al control de las autoridades aeroportuarias.
Al arribar, las valijas fueron resguardadas en el Ministerio del Interior ruso mientras se aguardaba que se presentaran los integrantes de la banda a retirar la carga.
El Ministerio de Seguridad envió un equipo especial de tres gendarmes para monitorear la entrega vigilada. En Rusia se detuvo a dos personas que fueron a retirar las maletas. También fue arrestado un exintegrante del servicio diplomático ruso, que habría sido quien facilitó el ingreso de las maletas con cocaína al edificio anexo de la Embajada de Rusia en Buenos Aires.
Uno de los detenidos en Argentina es un integrante de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, de origen ruso pero nacionalizado argentino. Fue arrestado al arribar el miércoles a Argentina proveniente de Italia.
El otro detenido en Buenos Aires también es de origen ruso y habría tenido a su cargo el armado de las maletas con la cocaína y la logística.
El supuesto líder de la banda tendría base en la ciudad alemana de Hamburgo, donde es rastreado por las fuerzas de seguridad locales, precisó Bullrich. "Estamos orgullosos como argentinos, como Gobierno, de haber logrado una de las operaciones más importantes, más complejas y sofisticadas en este mundo donde la narcocriminalidad siempre tiene contactos", destacó la ministra argentina.
Bullrich informó que actualmente se está estudiando la procedencia de la cocaína, que estaba embalada en paquetes con "una estrella" y "es de altísima calidad". "Podría ser de Colombia o Perú", estimó.
La funcionaria argentina no pudo precisar en tanto el destino que tenía la droga, si era para ser comercializada en Rusia para el consumo interno o el próximo Mundial de fútbol, o para ser distribuida en otros países, entre ellos Alemania, donde residiría el cabecilla de la banda.
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