Bogotá. AFP
Colombia se encuentra hoy sumida en un caos electoral, con reproches mutuos de las autoridades y citaciones de la Procuraduría, debido a la falta de resultados de las elecciones legislativas así como consultas internas de dos partidos realizadas el domingo.
El último boletín de la Registraduría Nacional sobre el resultado de los comicios en el Senado fue expedido el lunes temprano y aunque corresponde al 93,82% de la votación, el porcentaje restante es determinante en la conformación final del Senado de 102 escaños.
En la Cámara de Representantes (baja) la situación no es distinta y solamente se ha avanzado en informes regionales.
En cuanto a la consulta para elegir al candidato conservador a las presidenciales del próximo 30 de mayo, se conoce el 51% del total de la votación, con el agravante de que los aspirantes Noemí Sanín y Andrés Felipe Arias se encuentran prácticamente empatados y el conteo se suspendió.
Tanto Sanín como Arias denunciaron, cada uno por su lado, que la falta de información y la suspensión del conteo afectan a sus aspiraciones e incluso la imagen del país en el exterior.
La precandidata conservadora pidió a la misión de veeduría electoral de la OEA “su pronta colaboración con la vigilancia activa y atenta al transporte, custodia y escrutinio de los votos correspondientes a la consulta interna del Partido Conservador”.
“Debido a las dificultades y demoras inexplicables en la realización del pre-conteo de los votos en la consulta, y en pos de asegurar la transparencia y la aceptación popular de los resultados, les urgimos su pronta y oportuna intervención y acompañamiento al proceso”, precisó la solicitud a la OEA.
Hoy la misión de la OEA que vigiló los comicios legislativos advirtió que la
“transmisión telefónica de los datos preliminares no cuenta con un sistema eficaz de autenticación, verificación y auditoría, generando así un riesgo de distorsión”.
También lamentó la falta de capacitación de los jurados y pidió “simplificar los mecanismos de votación”, que no favorecen el voto en las personas de menor nivel educativo.
En tanto, la Procuraduría anunció que vigilará directamente el escrutinio y citó a los responsables de la empresa encargada de la transmisión de datos.
El lunes el gobierno del presidente Álvaro Uribe manifestó su preocupación por la lentitud del conteo y advirtió que ello pone en duda la legitimidad del proceso.
“Solicitamos al Registrador Nacional que en el marco de sus competencias adopte las medidas indispensables que permitan avanzar con mayor celeridad en el proceso de conteo y escrutinios”, señaló un comunicado del Ministerio del Interior.
La lentitud del escrutinio “genera graves tensiones políticas”, agregó.
Por su parte, Marco Hincapié, presidente del Consejo Nacional Electoral (máximo tribunal electoral), dijo que a partir de este martes se iniciarán los escrutinios y se le dará prioridad al conteo de votos por la consulta conservadora.
Nicolás Montoya, de la ONG Misión de Observación Electoral (MOE), explicó a la AFP que como ordena la ley, los jurados deben entregar las actas de votación antes de las 11 de la noche del día de las elecciones, y que en muchos casos, por lo complejo del proceso, el término se cumplió sin que concluyera el recuento de los sufragios.
En coincidencia con un comunicado de la Registraduría, Montoya anotó que con el escrutinio de la votación que se inicia este martes, se hará el conteo de los votos que no alcanzaron a ser registrados el domingo.
Confió en que el consolidado final pueda ser entregado antes del viernes.