Campesinos del recinto Las Damas caminan por la montaña para vender su producción láctea
Redacción Santo Domingo
Los campesinos del recinto Las Damas caminan por la montaña para vender su producción láctea. Los intermediarios esperan en la zona de Alluriquín.
Una caravana de agricultores y mulas cargadas de tanques metálicos con leche descendieron ayer desde una lodosa montaña. Venían desde al recinto Las Damas.
Luego de casi dos horas de travesía, llegaron hasta la parroquia Alluriquín, localidad ubicada en el kilómetro 80 de la carretera Alóag-Santo Domingo.
Las patas de las mulas se hundieron en el fango, lo que dificultó el viaje. Uno de esos agricultores es Luis Nogales, de 68 años. Él llegó cansado y con su ropa enlodada. “El camino está lleno de lodo y hay cinco deslaves”.
Nogales transportó en sus mulares 75 litros de leche, que los entregó a los choferes de los camiones, que no pudieron ingresar hasta Las Damas. El camino es lastrado y de tercer orden. En ese pueblo, el agricultor tiene una finca de 45 hectáreas.
Los intermediarios recogen la producción de los finqueros. Luego introducen una regla metálica que mide la cantidad de litros entregados. Finalmente, anotan el nombre del finquero y la cantidad recibida. El pago se realiza cada 15 días. Por cada litro de leche cancelan USD 0,32.
Otro finquero es Mario Guaspi. Él no solo trajo sus 31 litros de leche sobre las mulas, sino también a sus dos hijos Jefferson, de 4 años y Luis, de 17 meses.
Guaspi entregó su leche a Raúl Burbano, un comerciante que recolecta el lácteo. Reúne unos
1 000 litros al día. Otros dos propietarios de camiones lecheros recogen la misma cantidad.
En la caravana de los agricultores también estuvo Ricardo Cundulle. “Todos los años, en invierno, ocurre lo mismo. Tenemos que sacar la leche en mulas”.
Según Cundulle, en verano, los camiones lecheros ingresan sin problemas por la carretera que une a las fincas. “Incluso, a los intermediarios se les encarga la compra de balanceado y productos básicos para el hogar”.
Según él, el campesino no tiene que movilizarse a los centros poblados como Alluriquín o Santo Domingo. “Eso no se puede hacer ahora, porque los camiones lecheros no pueden ingresar”, comenta Cundulle, mientras se seca el sudor de su frente y golpea sus botas de caucho para liberarse momentáneamente del lodo.
Maquinaria y obreros de la Prefectura ya trabajan en la rehabilitación de la vía. El presidente de la Junta Parroquial, William Arteaga, informó que en el sector de Las Damas se producen alrededor de 5 000 litros de leche por día. En Alluriquín, la producción del lácteo llega a 30 000 litros.
El dirigente aseguró que hay otros sectores afectados por el invierno, como Violeta Luna, Seis de Marzo, Cooperativa Chimborazo y Las Pampas. La carretera que conduce a Las Damas es importante porque también comunica a Santo Domingo con el cantón Sigchos, en Cotopaxi.
“Los campesinos están en serios problemas, porque la mayoría de carreteras rurales está afectada por el invierno”.
Otra preocupación de Arteaga es la dotación de agua potable para los 10 000 habitantes de Alluriquín. Las tormentas de los últimos días causaron la destrucción de las tuberías que conducen el agua desde las vertientes naturales hasta los tanques de reserva.
“Ahora nos abastecemos de fuentes naturales alternas, pero de menos volumen”.
A la espera del mejoramiento de las vías, los campesinos retornaron a sus hogares por la misma vía enlodada y peligrosa. Algunos aprovecharon el viaje para comprar productos básicos para el consumo de sus familiares.
A esa misma hora, pasadas las 10:00, se reunió el Comité de Operaciones de Emergencia cantonal (COE), en la Junta Parroquial de Alluriquín. La reunión estuvo presidida por la alcaldesa Verónica Zurita.
El propósito fue buscar soluciones a los problemas que ocasionan los derrumbes y el invierno. En especial, la reubicación de siete familias en el coliseo local, que se adecuó como albergue. Se alista un plan.