Un grupo de trabajadores labora en el reciclaje de la basura de Pelileo y
Patate. Foto:Glenda Giacometti / EL COMERCIO
Los cantones Pelileo y Patate trabajan en el reciclaje de 12 toneladas de basura al día, mientras que Píllaro, Baños, Quero, Mocha, Pelileo, Patate, Tisaleo y Cevallos realizan en conjunto la revisión de 28 000 vehículos cada año.
También, 3 500 familias de Ambato y Salcedo buscan regar 15 000 hectáreas entre Tungurahua y Cotopaxi. Estos ejes de desarrollo unieron a nueve cantones de las dos provincias en tres mancomunidades.
La primera se creó en el 2012 para el manejo de la basura de los dos cantones. Entre el aporte de los ayuntamientos y de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo se invirtieron USD 900 000. Con esos recursos se construyeron las oficinas administrativas, dos galpones y se equipó la planta procesadora de los desechos.
Cinco personas protegidas con overoles, gafas y mascarilla separan el plástico, vidrio, papel y cartón. Estos materiales son enviados por una banda de caucho a unas celdas metálicas para ser compactados a presión; luego, los bloques son embalados. Este producto es vendido a las recicladoras.
En estas modernas instalaciones se reciclan 12 de las 40 toneladas de basura que generan los 40 000 habitantes de las urbes. Iván Cunalata embala los desechos no utilizables con plástico, los cuales son llevados al relleno sanitario de 70 000 metros cuadrados.
César Freire, gerente de la Empresa Pública, detalla que la mancomunidad es positiva puesto que lograron optimizar los recursos económicos. “Logramos optimizar la mano de obra y se extendió la vida útil del relleno sanitario”.
La capacitación para reciclar se inició con 1 800 familias en las dos ciudades, pero ahora son 13 000 que representan el 70% de la población. “En los próximos meses comenzará la formación del 30% restante”.
Hace cinco años, ocho municipios se agruparon en la Mancomunidad para la Gestión de Transporte Terrestre y Seguridad Vial. Están Pelileo, Tisaleo, Cevallos, Mocha, Quero, Píllaro, Baños y Patate.
Todos trabajan en la matriculación y la revisión mecánica, que por ahora es manual. En sus inicios matriculó a 18 000 automotores y ahora ya son 28 000 en el año. El gerente Hernán Pico dice que la unión ha dado resultados; por ejemplo, financiaron estudios de tránsito con fondos propios.
Eso beneficia a los alcaldes porque pueden solicitar los estudios sobre movilidad, semaforización, señalización vertical, horizontal, nuevas frecuencias… “Tenemos el personal técnico necesario para estos proyectos, no nos cuesta puesto que son financiados con los propios recursos que genera la entidad”, dice Patricio Sarabia, presidente de la Mancomunidad.
Para Pico este nuevo modelo de gestión beneficia a más de 40 000 personas de los ocho cantones. Ricardo Cáceres, vecino de Cevallos, cuenta que antes viajaba a Ambato para matricular su carro, pero ahora se queda en Pelileo. “Ahora hay más facilidades y la atención es rápida”.
La mancomunidad se financia con los USD 60 000 que reciben los ocho municipios del Ministerio de Finanzas por las competencias en tránsito y los recursos de la empresa.
La tercera mancomunidad, conformada por Tungurahua y Cotopaxi, protege 1 300 hectáreas de páramo del cerro Casahuala. Además, planifican construir un proyecto multipropósito para almacenar 8 millones de metros cúbicos de líquido. El objetivo es atender a 300 familias de las comunidades Cusubamba y Mulalillo del cantón Salcedo (Cotopaxi), que no tienen agua para la producción agrícola.
El caudal de la acequia Alta Fernández apenas riega 180 de las 400 hectáreas.
Enrique Montaguano, vecino de Mulalillo, cuenta que no ha logrado producir en sus dos cuadras de terreno. “Apenas riego una parte de mis sembríos de maíz y de papas. La situación es difícil”.
La creación de la mancomunidad crea expectativa en Dolores Yánez, presidenta de la Unión Organizaciones Campesinos de Mulalillo. Dice que sería una bendición para los agricultores de Tungurahua y Cotopaxi, porque regaría más de 400 hectáreas.
Luis Cuji, técnico del Parlamento Agua de la Prefectura de Tungurahua, indica que en los últimos 15 años, el caudal para riego bajó de 308 a 208 litros por segundo, afectando a 5 000 hectáreas. Con el manejo del páramo y la construcción de la represa se regarían 15 000 y ayudaría a 40 000 personas.
En contexto
La Mancomunidad de Tránsito y Movilidad, que tiene la sede en el cantón Pelileo, invertirá este año USD 1,2 millones de su presupuesto. Así se financiará la construcción y equipamiento de cuatro módulos para la revisión técnica de los automotores.