Nombramiento de Lula quedó en el limbo

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva ha promovido varias movilizaciones para rechazar el juicio contra Rousseff. Foto: Fernando Bizerra / EFE

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva ha promovido varias movilizaciones para rechazar el juicio contra Rousseff. Foto: Fernando Bizerra / EFE

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva ha promovido varias movilizaciones para rechazar el juicio contra Rousseff. Foto: Fernando Bizerra / EFE

La Corte Suprema de Brasil volvió a dejar ayer en el limbo el nombramiento del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva como ministro de la mandataria Dilma Rousseff, quien está cerca de ser sometida a un juicio político que le puede costar el cargo.

La sesión que debía juzgar las demandas que mantienen suspendida la designación de Lula como ministro de la Presidencia en el Gobierno de su ahijada política y sucesora acabó ni bien comenzó, frente a unas dudas planteadas por el magistrado Teori Zavascki.

El juez señaló que aún debe pronunciarse sobre algunas denuncias que pesan contra Lula y pidió que la Corte suspendiera entonces la decisión sobre su nombramiento como ministro, lo que fue acatado de inmediato por los otros diez magistrados. La Corte no propuso una fecha para retomar el juicio, por lo que puede ocurrir que, aún si la sentencia fuera favorable a Lula, el expresidente igual no pueda asumir.

La razón está en que el Senado decidirá dentro unos quince días si instaura un juicio con miras a la destitución de Rousseff, quien en ese caso sería separada del cargo durante los 180 días que dure el proceso y su lugar lo asumiría el vicepresidente Michel Temer, quien ha roto toda relación con la presidenta y con Lula.

De modo que si el Senado es más rápido que el Tribunal Supremo y decide procesar a Rousseff, Lula quedaría de todas maneras fuera del Gobierno junto con su sucesora.

Lula fue nombrado ministro de la Presidencia el pasado 16 de marzo y llegó a asumir el cargo un día después, pero un terremoto político y una catarata de medidas cautelares dejaron sin efecto su nombramiento y su posterior investidura.

Tiempos difíciles
Lula participó el martes en Sao Paulo de una reunión de la dirección nacional del Partido de los Trabajadores (PT), que él fundó y llevó al poder. Durante el encuentro quedó claro que la fuerza que gobierna Brasil hace más de 13 años vive tiempos difíciles.

“Tanto Lula como nosotros evaluamos que será difícil ganar en el Senado porque, aún cuando es un escenario distinto, los partidos que estuvieron en nuestra contra en la Cámara van a repetir su comportamiento”, declaró uno de los participantes de la reunión, el diputado Zé Geraldo.

Pese a todas las dificultades, Lula ganaría la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 2018 con 21% de los votos, según un sondeo de Datafolha del 10 de abril.

“Tiene mucho carisma, hizo un gobierno muy popular con altísima aprobación (...) pero yo no creo que pueda volver a ganar una elección ” , afirmó Sergio Praça, analista de la Fundación Getulio Vargas.

Suplementos digitales