Dilma Rousseff dijo ser inocente de los cargos que propiciaron el juicio político en su contra, durante su defensa frente al Senado de Brasil. Foto: AFP
La presidencia de Dilma Rousseff en Brasil está a punto de terminar después de cinco años y medio en el poder, con una destitución que ya se da por segura.
La sesión final del proceso de “impeachment” contra Rousseff en el Senado, similar a un juicio convencional ante un tribunal, arranca hoy, pero podría terminar tras una jornada maratoniana sólo en la madrugada del miércoles. En total podrían ser más de 18 horas de debates, réplicas e intervenciones finales.
Acusación y defensa (unas cinco horas):
La acusación, que culpa a Rousseff de “delitos de responsabilidad” por irregularidades en la elaboración de los presupuestos públicos durante su Gobierno, tiene hora y media para presentar sus argumentos. El mismo tiempo le corresponde a la defensa de la presidenta. A ello se suma una hora que se le otorga a cada parte para responder a los argumentos contrarios.
Votación final (hasta 14 horas):
El Pleno del Senado emitirá después su veredicto final sobre la destitución de Rousseff. Dos senadores favorables al “impeachment” y uno de los que están en contra abrirán la moción con una intervención de cinco minutos cada uno, según el portal “O Globo”. Después empieza la votación en sí. Cada uno de los 81 senadores tiene derecho de palabra durante diez minutos para explicar su voto. Si todos agotan los tiempos, habrían pasado desde el comienzo de la votación más de 13 horas hasta que el tablero electrónico del Senado dé por sellada la destitución de Rousseff.