Las puertas del Bicentenario se abrirán para el ingreso de los fieles a las 17:00 del lunes 6 de julio hasta las 09:00 del martes 7 de julio ininterrumpidamente. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO.
El Parque Bicentenario será divido en 33 cuadrantes, separados con vallas metálicas, para distribuir a los asistentes a la misa campal que el papa Francisco oficiará el martes 7 de julio del 2015, en Quito. En cada espacio estarán entre 23 000 y 34 000 personas. Así lo asegura Francisco Fernández, gerente de proyecto de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana del Parque Bicentenario.
Debido a la visita papal, el espacio donde antes operaba el aeropuerto de Quito se cerrará al público durante 10 días, desde el 1 de julio. Ese día se iniciará la instalación del envallado: son 10 500 metros de vallas que se producen actualmente.
En cada uno de los cuadrantes habrá personal de seguridad, Policía y voluntarios. Cada uno contará con un contingente de primeros auxilios, de bomberos, una carpa con personal del Ministerio de Salud para atención de primera instancia, también una capilla eucarística (de 3×3 metros) y una carpa para confesiones.
Está previsto que el Parque se vuelva a abrir tres días después de realizada la misa campal porque, dice Fernández, hay que desmontar todo las estructuras metálicas.
La disposición de los cuadrantes será variable, la mayoría tendrá seis metros de separación entre uno y otro, pero en los carriles centrales -puntos de mayor afluencia- habrá 10 metros de separación, y en otros de mayor accesibilidad de gente habrá hasta 15 metros. Todo en función del flujo de las personas para el ingreso y la salida.
Al momento hay 15 accesos al Parque, de los cuales 12 son para ingreso y egreso, y tres solo de salida, esos se planifican como para una emergencia y no vaya contra el flujo de la gente.
Para solventar la necesidad de hidratación de más de un millón de personas, que se prevé asistan a la misa, se necesitarán miles de botellones de agua, ante esa dificultad -cuenta Fernández- que la mejor idea fue colocar 42 tanqueros con flautines para que las personas puedan proveerse de líquido, además habrá carpas de hidratación, 90 llaves surtidoras de agua potable, etc.