Ya está listo el Festival y Regata Balsera del cantón General Villamil (Playas). Foto: Centro Intercultural Cacique Tumbalá, de Playas
Los bocetos saltaron del papel a enormes velas de lona que cobrarán vida con la brisa marina. Mantarrayas y gaviotas, símbolos precolombinos y cerámicas, paisajes de surfistas y balseros son algunos de los diseños creados por artistas playenses.
Sus lienzos darán colorido e identidad al Festival y Regata Balsera, que arrancará a las 10:00 de este domingo 31 de diciembre del 2017 en el cantón General Villamil (Playas), ubicado a 92 kilómetros de Guayaquil.
La Dirección de Turismo del Municipio, el Centro Intercultural Cacique Tumbalá y las Cooperativas Balseras organizan este evento para recibir el 2018. El punto de partida de la regata será el sector de la playa Humboldt, junto al rompeolas.
Mientras esperan la llegada de los ganadores, los visitantes podrán disfrutar de la gastronomía local, adquirir artesanías y presenciar la participación de grupos de danza folklórica. También habrá rituales tradicionales y se elegirá a la reina Festival Balsero.
Las balsas están arraigadas a la historia de este concurrido balneario guayasense. En el 2015 fueron declaradas Patrimonio Inmaterial de la Nación, por las técnicas de navegación y construcción que aplicaron los pueblos prehispánicos, asentados en este lado del Pacífico.
Según estudios del Ministerio de Cultura y Patrimonio, desde los tiempos de la cultura Valdivia (4000 a 2000 a.C.), se empezaron a emplear embarcaciones de balsa. Luego fueron utilizadas a lo largo de varias culturas hasta llegar a la cultura Huancavilca (500 a.C. a 1500 d.C.).
Maestros y alumnos del Centro Intercultural Cacique Tumbalá de Playas rinden un homenaje a los primeros balseros al revivir ese pasado en las velas del festival, convertidas en lienzos. A lo largo de esta semana plasmaron los diseños con ligeros pinceles y colores llamativos.
Berny Saldarriaga es uno de los promotores del centro. Entre pinceladas rememoró la travesía de los coches clásicos para atravesar, sobre troncos de balsa, un brazo de mar en Data de Villamil, donde ahora hay un puente.
Aunque han pasado siglos, las balsas siguen navegando en General Villamil. Algunos pescadores las emplean para sus faenas diarias.