Redacción Cultura
El Ballet Nacional del Ecuador presentó ayer su última función en el Teatro Nacional de la CCE, espacio que entra a remodelación.Se presentó ‘La Bella durmiente’, uno de los clásicos más representativos del ballet, con música de Piotr Ilich Tchaikovsky.La música y la coreografía son originales de Tchaikovsky y Marius Petipa. Y el argumento fundacional de este cuento universal fue escrito por Charles Perrault y los hermanos Grimm. El Ballet Ecuatoriano de Cámara, integrante del Ballet Nacional, planteó sobre el escenario una adaptación coreográfica que conserva la interpretación estética y el lenguaje escénico de esta obra clásica y seductora.El maestro Rubén Guarderas, director del Ballet Nacional, dijo a este Diario que el trabajo del 2009 fue fructífero. Hubo 237 presentaciones en el país, a las que asistieron 250 000 espectadores. “En 19 provincias, el Ballet Ecuatoriano de Cámara ofreció 53 funciones”.Guarderas destacó que las actuaciones no solo fueron en las grandes y medianas ciudades, pues los pueblos más pequeños -como Pujilí, Buena Fe, Ventanas- disfrutaron de ‘Romeo y Julieta’ y de la danza contemporánea. Guarderas reconoció el convenio que mantiene con la Casa de la Cultura, núcleo de Los Ríos.La Amazonía fue otra región que visitó el BEC. El cuerpo de artistas está conformado por 86 bailarinas, 20 de ellos son extranjeros. Provienen de Cuba, Chile, Perú, México y Venezuela. Con un presupuesto anual de USD 1 3000 000, el BEC cumplió su tarea el año pasado. Está adscrito a la Casa de la Cultura.