El Gobierno ha entregado en seis meses entre USD 17 millones y USD 19 millones por compensaciones para el sector privado.
Tras un año sin preferencias arancelarias por parte de EE.UU. el sector exportador ecuatoriano lucha contra las consecuencias de esta situación. El 27 de junio del 2013 el secretario de comunicación, Fernando Alvarado, hizo pública la renuncia unilateral del país a la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas (Atpdea).
Un mes más tarde, el 31 de julio del 2013, esta venció y desde ese momento los productos nacionales ingresaron al mercado estadounidense pagando aranceles que van de entre 1,3% hasta más del 15%.
Para evitar el impacto de esta situación en el sector privado, el Gobierno, a través de la Ley de Incentivos del Sector Productivo, puso a disposición de los exportadores los Certificados de Abono Tributario (CATs), que sirven para el pago de obligaciones tributarias, aduaneras o con la banca pública.
Para esto el Gobierno reservó USD 9 millones para el 2013 y USD 25 millones para este 2014. Los CATs están destinados para 650 empresas y 166 productos.
Entre estas partidas están las flores. Pablo Viteri, propietario de la finca Pacific Bouquet, se acogió a este mecanismo, ya que el 65% de sus exportaciones de rosas, rosas spray, hipéricum y otras flores de verano van a EE.UU.
El CAT que se entrega a los exportadores corresponde a un valor equivalente al 100% de aranceles pagados en EE.UU. En el caso de Viteri este se le otorga de forma mensual, ocho días después de haber realizado la declaración aduanera.
Él indicó que no ha tenido ningún problema para acceder al dinero del CAT y con ello ha podido pagar impuestos. Pero, además, evitado perder el mercado.
“Exportamos unos USD 500 000 por año. De esto USD 325 000 son ventas a EE.UU. La Aduana nos reembolsa el 6,20% de esto, correspondiente a los aranceles pagados, lo que implica unos USD 20 000 anuales”.
Este monto, asegura, ha evitado un impacto económico negativo frente a la falta de Atpdea y del Sistema General de Preferencias (SGP), que también terminó el año pasado. Los compradores les obligaron a bajar los precios en una cantidad similar a los aranceles pagados. Pero, con la compensación del Gobierno lograron equilibrarse.
Una exigencia similar le hicieron los importadores a Xavier Herbas, de la exportador de brócoli Nova. A diferencia de Viteri, él decidió que no era posible y desde hace diez meses no exporta a EE.UU.
“El cliente decía le compro, pero le pago a usted descontando los aranceles. Cuando usted recibe el CAT ahí se cobra. Decidimos que era mejor un pago completo sin tener que esperar y dejamos de embarcar allá. Gracias a Dios encontramos mercado en Japón”.
La empresa envía, ahora, el 70% de sus ventas a los japoneses y el resto a la Unión Europea, Canadá y Chile. EE.UU. representaba el 20% de sus ventas.
Hasta el momento ni el Gobierno ni el sector privado han logrado cuantificar cuántas empresas han dejado de exportar a EE.UU. o cuantas han cerrado sus puertas. Sin embargo, desde la Cámara de Comercio Ecuatoriana Americana se indicó que un efecto real tras la pérdida de la Atpdea y el SGP ha sido la reducción de los precios de los productos.
“La entrega de los CATS no ha impedido que caigan los precios. Más bien ha llevado a eso porque los importadores saben que existe la compensación y piden que se bajen los precios a los exportadores para mantenerse en el mercado”, dijo Cristian Espinosa, presidente del gremio.
El directivo indicó que los CATS son un gasto también para el Estado, que en el primer semestre de este año ha sido de USD 17 millones. Aunque desde la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), aseguran que alcanza USD 19 millones.
Otro de los sectores que se acogió a este mecanismo es el textil. Javier Díaz, presidente de la Asociación de Industrias Textiles del Ecuador (AITE), asegura que han enfrentado demoras para recibir la compensación.
Uno de los inconvenientes, además, fue que el 15% de las exportaciones al mercado estadounidense iban a Puerto Rico y, por ser considerado por el país como un paraíso fiscal, no se les entregó compensación por el envío a este estado asociado a EE.UU.
Más allá de ello sus exportaciones cayeron en el periodo enero abril del 2013 frente al 2014 en un 14%. El rubro de medias nylon fue uno de los más afectados, con una baja de 19%.
Estos resultados contrastan con las exportaciones totales de Ecuador a EE.UU., que crecieron de USD 3518, 9 millones en el periodo enero abril del 2013, a USD 3724,3 millones en el mismo lapso de este año.
Sin embargo, Cristian Espinosa asegura que esto se debe a que, pese a la pérdida de los beneficios arancelarios del país, hay factores coyunturales como mayor compra de banano (nunca fue beneficiario de los sistemas), mayor demanda de flores, más ventas en volumen de ciertos productos como el café, etc., que han permitido este crecimiento.