Amparo Vinueza, familiar de un montañistas encontrado en el Chimborazo. Foto: Maria Isabel Valarezo / EL COMERCIO
Por las prendas de vestir, los allegados están seguros de que los tres cadáveres hallados el sábado pasado en el Chimborazo pertenecen a los ecuatorianos Paulo Vinueza, Roberto Silva y el chileno Cristian Munchmeyer.
“Mi hermano incluso tenían puesto (cuando lo hallaron) un buzo que lleva escrito Paulo”, aseguró Amparo Vinueza, hermana del andinista.
Ella y la familia Munchmeyer llegaron la mañana de este 25 de agosto al departamento de Medicina Legal, en el noroccidente de Quito, luego de que los cuerpos fueran trasladados desde Chimborazo.
Un equipo de médicos legales y peritos en antropología forense están ahora a cargo de la investigación, que ratificaría o no la identidad de los cadáveres.
Según Fausto Olivo, director nacional de Criminalística, hasta mañana miércoles 26 de agosto se tendrá un informe de identidad humana.
Detalló que junto a los cuerpos se hallaron fotografías que también servirán para realizar las experticias.
La familia Munchmeyer, en cambio, tiene previsto cremar el cuerpo de Cristian.
La familia Vinueza todavía no ha decidido el destino que se darán a los restos. Sin embargo, la familiar aseguró que el deseo de su hermano fue dejarlo en el nevado. Eso fue lo que hicieron en noviembre de 1993, cuando sucedió el deslave en el que perdió la vida. “Pero ahora la naturaleza nos está devolviendo”, dijo.