El empresario Álvaro Noboa ofreció una rueda de prensa para hablar sobre las denuncias de Swiss Leaks. Foto: EL COMERCIO
El empresario y ex candidato presidencial Álvaro Noboa fue tajante ante los periodistas de varios medios de comunicación: “Álvaro Noboa, ecuatoriano, de 64 años de edad, a título personal no tiene ni ha tenido cuentas en el HSBC”.
Así el político guayaquileño salió al frente de las denuncias de ‘Swiss Leaks’, una investigación basada en datos sobre miles de supuestas cuentas escondidas en el banco HSBC, lo que varios medios internacionales desvelaron como la cara oculta del secreto bancario en Suiza.
Swiss Leaks menciona que Noboa comenzó a ser cliente de HSBC en 2006 y llegó a tener entre 2006 y 2007 cerca de USD 92,1 millones.
En conferencia de prensa brindada la tarde de este lunes 9 de febrero del 2015 en sus oficinas al sur de Guayaquil, argumentó que el Grupo Noboa es una multinacional que tiene negocios en distintas partes del mundo y a su vez estos negocios tienen cuentas en diferentes bancos del mundo entero.
“Estos negocios responden por sus impuestos y obligaciones ante las autoridades tributarias del país donde ocurren. Estos negocios son continuamente controlados y no hay en ningún lugar del mundo reclamo por evasión tributaria alguna. No necesariamente soy propietario de estos negocios ubicados en el mundo entero”, explicó.
El empresario guayaquileño, fundador del extinto Partido Renovador Institucional de Acción Nacional (Prian), aclaró que la investigación de Swiss Leaks, “es una investigación de un grupo de amigos. No está ninguna autoridad involucrada, ni del Ecuador ni de Europa, ni de ninguna parte del mundo. Usted va a una página website, dice Swiss Leaks pero no vemos ni siquiera un responsable. Pero como aquí todo se riega enseguida, mejor salí a aclarar esto para que no sea después esta noticia cambiada o salga de una manera distinta que la verdad”.
Destacó que a nivel empresarial sigue recibiendo invitaciones de todas partes del mundo como ha sucedido desde mucho tiempo atrás. Y mostró una foto de una invitación hecha hace unos años por Fidel Castro.
“Con él hablé en Nueva York. Él me invitó e invitó a un grupo de empresarios del mundo entero, en casa de un amigo mío, a invertir en ese país. Entonces no les extrañe que Fidel Castro me invite a invertir en su país. Así me invitan de Europa, de Asia, de los Estados Unidos hombres de negocio que quieren hacer negocio conmigo”, dijo.
Y recordó que cuando “ganó la Presidencia en 1998 el candidato mío a la vicepresidencia era Alfredo Castillo, un hombre de ideas socialistas. Entonces me imagino que eso lo vio con buenos ojos Fidel Castro. Yo iría a invertir en ese país una vez que se arreglen todos los reclamos por derechos humanos que tienen los gobernantes de Estados Unidos y Europa planteados. Cuba es un país muy bueno para el turismo, para la agricultura y tengo muchos amigos cubanos en el mundo entero”.