El Mercurio, Chile, GDA, DPA y AFP
La noticia de que Sarah Jessica Parker había sido madre de gemelas en junio dejó a algunos sorprendidos.
Catálogos para elegir sustituta
En casi todos los estados de EE.UU. existe una legislación sobre madres sustitutas y se permite pagar.
En Washington, Michigan, Utah, Arizona, Nuevo México y Nueva York no se permite el arriendo de vientres. Pero en California, Iowa, Pensilvania y Ohio, entre otros, sí cuentan con el visto bueno.
Hay oficinas de abogados que tienen madres subrogantes en catálogos. Por ejemplo, Melissa Brisman, citada por AFP. Su oficina está en Nueva Jersey y cada año gestiona 150 embarazos. Según ella, al año en EE.UU. se contrata a 6 000 madres.
En el último año, la recordada actriz de la serie Sex and the City ha sido vista en varias alfombras rojas, lanzó una línea de ropa y un nuevo perfume, filmó una comedia romántica con Hugh Grant y fue fotografiada en la filmación de la cinta Sex and the City 2.
Hasta se habló de que estaba atravesando una crisis matrimonial Matthew Broderick. Siempre con el vientre plano.
Broderick y Parker contrataron a una madre de alquiler por medio de una clínica en Los Ángeles, aunque ella, en apariencia, no tiene problemas de fertilidad.
El hijo de la pareja, James Broderick, de quien Sarah Jessica lució el embarazo con orgullo ya cumplió siete años.
Cuando las críticas y rumores comenzaron, diciendo que la actriz era superficial al renunciar a llevar a su bebé en el vientre en nombre de la agenda y los contratos comerciales, un amigo de la familia Broderick aseguró -de forma anónima a la revista Entertainment Weekly- que el contrato se dio porque Parker no había podido quedar embarazada en sus últimos intentos.
En ese momento, en EE.UU. se comenzó a hablar de la corriente de los famosos que alquilan el vientre de otra mujer y así tener a sus hijos sin el ‘problema’ de arruinarse la figura. La actriz Sharon Stone, quien ya había tenido un hijo de forma natural, también tuvo a su segundo bebé con ayuda de una madre subrogante, mientras ella trabajaba.
En estos casos, los futuros padres acompañan el embarazo de la madre sustituta y cuando el bebé nace, los padres adoptan al bebé, por motivos de legislación.
Muchas mujeres jóvenes que necesitan dinero para terminar sus estudios son las elegidas, para el alquiler de sus vientres.
Las mujeres con problemas de fertilidad, que han sido madres con ayuda de una subrogante, miran con ojos críticos esta práctica. Muchas se ven reflejadas en el testimonio de Alexandra Kuczynski, ex periodista de The New York Times, quien publicó en ese diario su testimonio sobre los largos años de tristeza y frustración que atravesó antes de optar por contratar a una madre sustituta.
Aunque Kuczynski reconoce que: “Mientras más engordaba Cathy (la madre sustituta) con el embarazo, más feliz me sentía yo de no ser la embarazada. ¡Qué placer no tener sus molestias! No sentirme inflada ni pesada, no tener que caminar como pato por el peso, ni dormir mal”. Quizás ese argumento, tan superficial, pesa a la hora de que una rica y famosa decida disfrutar de la maternidad, pero sin estragos.