El atacante asestó puñaladas en el andén a otro hombre y siguió camino hasta toparse con dos ciclistas a los que también atacó. Foto: EFE
Un joven que sufría al parecer problemas psíquicos y de drogas mató hoy, 10 de mayo, a puñaladas a un hombre e hirió a otros tres en una estación de tren suburbano en las afueras de la ciudad de Múnich, comunicaron las autoridades alemanas.
El agresor, un hombre de 27 años de nacionalidad alemana, protagonizó el ataque a primera hora de la mañana al grito de “Infiel, debes morir” y “Allahu Akbar” (“Dios es grande”), pero hasta ahora no ha podido ser confirmada ninguna motivación política o vínculo con organizaciones terroristas.
El atacante arremetió con un cuchillo contra un pasajero en un tren en dirección a Múnich a las 04:50 horas locales, en momentos en que muchos viajaban al trabajo en la capital bávara. Al salir del vagón asestó puñaladas en el andén a otro hombre y siguió camino hasta toparse con dos ciclistas a los que también atacó.
Una de las víctimas, de 56 años, falleció en el hospital poco después. Los otros tres, de 58, 43 y 55 años, están heridos, uno de ellos en estado crítico. El asalto tuvo lugar en Grafing, una localidad de 13 500 habitantes ubicada a unos 30 kilómetros al este de Múnich. Poco después, el agresor fue reducido y detenido por la Policía. Iba descalzo.
El ministro bávaro del Interior, Joachim Hermmann, dijo que el atacante había admitido el delito y que sufría problemas mentales y de drogas. La Policía reportó que no tiene indicios ni de servicios de inteligencia alemanes ni extranjeros de que estuviese vinculado “en forma alguna” a grupos o personas islamistas o salafistas.
Tampoco han sido encontrados videos que apunten a que se hubiese radicalizado, precisó Lothar Köhler, director de la policía criminal de Baviera. Las autoridades investigan también en esa dirección. En los interrogatorios el atacante dijo que se había convertido al islam. Hacía dos años que estaba desempleado y había viajado a Baviera procedente del estado de Hesse, donde residía.
La Fiscalía duda de que el agresor esté en plena posesión de sus facultades mentales. El fiscal Ken Heidenreich calificó las declaraciones del hombre de “confusas”. Mañana será llevado ante el juez por cargos de asesinato e intento de asesinato.
La alcaldesa de Grafing, Angelika Obermayr, se mostró consternada y dijo que el ataque en su “localidad pequeña y sumamente pacífica” había sacudido a los residentes. “Hasta ahora era impensable que algo así pudiera pasar aquí”.