Redacción Deportes
Los azulgranas tienen un reto en la Copa Libertadores de América: superar los octavos de final. El club quiteño llegó hasta esa instancia en 1989, bajo la dirección del entrenador Óscar El ‘Cacho’ Malbernat.
En esta edición, el plantel afrontará el torneo en condición de bicampeón del fútbol ecuatoriano, un éxito que consiguió el año pasado bajo la dirección del argentino Rubén Darío Insúa.
Por ello, el técnico se ilusionó con la posibilidad de cumplir el objetivo copero. “Deseamos hacer historia en la Copa. Tenemos un buen plantel para soñar con eso”, expresó el entrenador en el inicio de la pretemporada, el pasado 4 de enero en Carcelén.
Para ello, el DT pidió a la nueva directiva que se mantenga la base del plantel de 2009. Aún así, jugadores como Michael Arroyo y Luis Fernando Saritama aún no definen su continuidad.
En cambio, el plantel se reforzó con los laterales Juan Carlos Paredes, José Aguirre y los volantes de marca Edwin Tenorio y José Vizcaíno. Además, se ratificó a los foráneos Franco Niel, Iván Borghello, Marcos Pirchio (argentinos) y Mauricio Donoso (chileno).
Los chullas debutarán en la Copa el 9 de febrero ante el uruguayo Atlético Cerro, en Montevideo. Insúa tiene previsto llegar a ese juego con cuatro cotejos previos.
El primero ya se jugó el domingo en Chile. El plantel empató 1-1 con Unión Española, en Chile. Hoy, en ese país, juega su segundo partido ante el Ñublense, a las 18:00. El siguiente partido será el 26 ó 28 de este mes. El rival pudiera ser Unión Española.
En cambio, el último encuentro antes de afrontar la Copa será el debut en el torneo local.