Madrid, Ansa
El Gobierno aprobó el 30 de marzo una oferta de 1 989 plazas para el 2010, de las cuales 781 son en la administración general del Estado, 454 en los cuerpos de seguridad y 754 en las FF.AA.
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Fernández De la Vega desestimó que reforma laboral incluya un abaratamiento del despido, porque el plan del gobierno en el diálogo social “no merma los derechos de los ciudadanos”.
El Banco de España prevé que la economía española caiga el 0,4% en 2010 y crezca 0,8% en 2011.
El reporte , más pesimista que las previsiones del Ejecutivo, señala una contracción de 0,3% en 2010. Mientras, en Justicia se autorizaron 2 030 plazas, precisó la vicepresidenta del gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
Se trata de una reducción de 87%, pues de las 15 084 plazas del 2009 se aprobaron unas 1 989 para 2010, lo que supone un ahorro de 280 millones de euros respecto del 2009, enmarcado en el plan de “austeridad”, explicó la vicepresidenta.
El secretario general de Comisiones Obreras (CC.OO.), Ignacio Fernández Toxo, advirtió que “no se puede estirar el recorte del empleo público hasta extremos insoportables”, porque puede haber riesgo de servicios públicos “absolutamente ineficaces”.
En línea similar, una secretaria de Unión General de Trabajadores (UGT), Yolanda Palomo, manifestó su “rechazo absoluto”, pues la medida “deteriorará la calidad de los servicios”. Además, Palomo consideró que habrá “mayor gasto público a medio y largo plazo por la necesidad de externalizar servicios, principalmente esenciales, ante la demanda ciudadana”.
Los sindicatos también criticaron el informe del Banco de España, que habló de establecer “una figura contractual común para nuevas contrataciones con coste de despido inferior al del contrato indefinido actualmente en vigor”.
Toxo pidió que esa institución “deje de interferir en el diálogo social” para una reforma laboral, en trámite por los sindicatos, empresarios y el Gobierno, que ya planteó penalizar el contrato temporal para que se opte por una contratación fija.
Por su parte, el secretario de acción sindical de UGT, Toni Ferrer, reprochó que el Banco de España ponga “el acento en el mercado de trabajo como si fuera la causa principal de la crisis”.