Redacción Cuenca
Con poca afluencia de niños y adultos se inició hoy la vacunación contra la gripe estacional en la capital azuaya.
En el Centro de Salud 3 de Cuenca, los padres de familia que llegaban por atención médica recién se enteraban sobre la campaña impulsada por el Ministerio de Salud.
Por ejemplo, Guillermina Ganán, de 45 años, tras hacerse atender con la ginecóloga, regresó a su casa a buscar a su hijo de un año dos meses para hacerlo vacunar. “Aproveché ahora que hay poca gente porque puede aumentar la demanda y terminarse las dosis”, expresó.
Para Francisco Vélez, padre de familia, esta vacuna es buena para subir las defensas y evitar que una gripe agrave la salud de la persona. Según el director de Salud, Julio Molina, para Azuay llegaron 57 000 dosis.
El 60% se distribuyó a los hospitales y centros urbanos y el resto a subcentros rurales. Estos trabajarán también en brigadas móviles.
Según cálculos de Molina, unas 12 000 dosis se aplicarán a niños de seis a 23 meses, y la diferencia a los mayores de 65 años. Para cubrir a la población vulnerable a la gripe común se están coordinando brigadas por sectores sociales.
Por ejemplo, el miércoles se aplicará la vacuna en guarderías y el jueves a los sacerdotes y religiosas mayores de 65 años.
La primera fase de vacunación se extenderá hasta el 18 de este mes y luego vendrá la etapa de barrido dirigida a poblaciones de menor concentración y cobertura.