El monumento de la Plaza de la Independencia fue erigido en honor a los héroes caídos en la batalla por la libertad de Quito. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El Primer Grito de Independencia no recibe la atención que merece. Son pocos los que toman en cuenta las implicaciones del 10 de Agosto de 1809 y lo que representa.
Esta ocasión, 205 años después, la fecha incluso queda opacada por la entrada en vigencia del nuevo Código Integral Penal. Julio César Trujillo, abogado, político, escritor y académico, lamenta que el 10 de Agosto ya no tenga la importancia de antes en la manifestaciones públicas.
Uno de los motivos es que los organismos estatales no le dan la relevancia adecuada. Y recuerda que hace años se trataba de una fiesta muy solemne y de mucha veneración.
Hasta antes de la Constitución de 1998, la posesión presidencial y el informe anual de labores tenían lugar ese día.
Jorge Núñez, historiador y académico, explica que la fecha cambió para que coincidiera con el inicio del año fiscal, el 15 de enero. Pero, a su criterio, los constantes cambios de gobierno, que sucedieron en los 90 y primeros años del 2000, contribuyeron a que la fecha de posesión no sea tan importante.
La Constitución de 2008 cambió nuevamente el día de posesión. Los legisladores constituyentes decidieron retomar una fecha cívica, de importancia nacional, según Gina Godoy, asambleísta de Alianza País desde entonces, que simbolice la lucha por conquistar la independencia. Pero optaron por el 24 de Mayo, día de la Batalla de Pichincha, la fecha de culminación del proceso de Independencia.
Esto pese a que el 10 de Agosto le otorgó a Quito el apelativo de ‘Luz de América’, por ser el primer grito de independencia de las naciones hispanoamericanas. Para Trujillo esta es una razón por la que jamás dejará de ser una fecha memorable para el Ecuador, que representa la libertad y la justicia.
Desde el inicio del gobierno de la revolución ciudadana, las celebraciones del 10 de Agosto en Carondelet han tenido un toque más político partidista, que cívico e histórico. Las tarimas y conciertos, se han vuelto una tradición.
No obstante, este año será diferente. Justamente por razones políticas coyunturales. No habrá concierto ni tarima en la Plaza de la Independencia, porque eso lo organizaba el Municipio, que ya no está en manos del oficialismo. Incluso, hasta el cierre de esta edición, tampoco estaba confirmada la participación del presidente Rafael Correa.
Para hoy, el Gobierno prevé ejecutar una jornada cultural más tranquila. El objetivo es celebrar la gesta heroica y los 7 años del funcionamiento del Palacio de Carondelet como un museo abierto.
Este año, la agenda de la Presidencia se iniciará a las 10:00 con la exposición ‘Muriel Irreverente’. En la tarde habrá visitas teatralizadas. Y, a las 23:30, será la Gala Libertaria, con los Granaderos de Tarqui. El evento concluirá con juegos pirotécnicos a la medianoche y las notas del Himno Nacional.
El Municipio mantendrá la tradición de abrir los museos del Centro Histórico con entrada gratuita, hasta las 22:00. Sin embargo, esto forma parte de las actividades generales de la agenda del ‘Verano de las artes’.
Pero no todo tiene que ver con la política como tal. Así lo aclara Núñez. Es algo mucho más simple: el regionalismo. Es una cuestión que viene de hace muchos y no es cuestión del Gobierno de turno. A estos argumentos agrega el hecho de que, en ciertos lugares del país, no se acepta la importancia del 10 de Agosto y se cuestiona que Quito fue la ‘Luz de América’.
Otro factor que se debe tomar en cuenta es la cantidad de fechas cívicas que se celebran en Ecuador. Esto hace que el 10 de Agosto quede como una fecha más en el calendario.
En otros países las fiestas cívicas nacionales, en especial las de independencia, tienen un enorme grado de simbolismo. Son celebraciones que conmueve a toda la nación, dice el historiador. Algunos buenos ejemplos son México, Estados Unidos y España, donde la iniciativa nace de los mismos ciudadanos, ponen banderas en sus casas y visten los colores patrios.
La celebración en Ecuador contrasta con lo que sucede fuera del país no solo por eso. Las comunidades de ecuatorianos que viven en el exterior festejan el 10 de Agosto con mucha más efusividad, organizan festivales y desfiles, como los que sucederán este fin de semana en Los Ángeles, Miami, Nueva York y Orlando.
Las embajadas y consulados también organizan eventos artísticos, culinarios y culturales, como sucederá en Madrid, Montreal y Milán.
Entre los consejos, que dan tanto Trujillo como Núñez, para rescatar el significado del primer grito de independencia está ilustrar a la población sobre su importancia. Así como recuperar la solemnidad de los eventos cívicos que se conmemoran en esta jornada, con la cual se marcó el inicio del Ecuador en el que ahora vivimos.